La tonelería es un arte que consiste en construir barriles o toneles de madera para almacenar diferentes productos, desde granos y harina hasta bebidas alcohólicas como el vino o el whiskey.
Esta, es una tradición milenaria que ha perdurado hasta nuestros días, pero que ya no goza de la popularidad que tuvo en el pasado, pues cada vez menos personas se interesan por esta ardua labor.
Por eso si quieres conocer más sobre este antiguo e interesante trabajo, sigue leyendo.
Contenido
La tonelería es un arte milenario
Breve historia de la tonelería
Se sabe que el oficio de la tonelería ya existía desde la época antigua, pues, de hecho, la labor de los toneleros (carpinteros que elaboraban barriles) era muy apreciada por los antiguos romanos quienes buscaban nuevas formas para almacenar granos y sobre todo el vino.
Asimismo, el proceso de elaboración de los toneles no ha variado mucho.
Por el contrario, a pesar de los avances tecnológicos, las técnicas se han mantenido casi iguales por al menos 2 milenios.
Asimismo, aunque los toneles eran especialmente populares en la antigua Roma, lo más probable es que no se originaran allí, sino más bien en alguna zona de la actual Grecia.
En aquella época los barriles se idearon como una alternativa para el almacenamiento de toda clase de alimentos y diversos materiales que muchas veces se perdían por estar mal guardados.
Un ejemplo de esto, se vio en las ánforas, unos recipientes hechos con arcilla en donde se almacenaba el vino.
Estas ánforas eran frágiles y se rompían fácilmente. Por eso los artesanos empezaron a construir recipientes de madera, un material que en esa época ya era muy popular por su maleabilidad.
Asimismo, desde aquella época se sabía que la madera de los barriles ayudaba a que el vino tuviera mejor sabor y al mismo tiempo permitía que los granos permanecieran en mejor estado por más tiempo.
Y, aunque en muchas ocasiones el trabajo era hecho por esclavos, eran los artesanos romanos quienes enseñaban la técnica.
Así, el proceso continuó por varios siglos hasta que el Imperio Romano colapsó en la Edad Media y, los esclavos (ahora libres) expandieron la práctica tonelera por el resto de Europa.
De hecho, la tonelería fue aceptada como un arte durante el medioevo y los franceses se convirtieron en los maestros más destacados de esta profesión, pues siguieron experimentando con diferentes maderas para mejorar la producción de vinos.
La llegada de la tonelería al continente americano
Los conquistadores españoles fueron los primeros en introducir los toneles en América a finales del siglo XV.
Sin embargo, la tonelería no se desarrolló como un arte, hasta finales del siglo XVI y principios del siglo XVII cuando los colonos ingleses llegaron a la región de Nueva Inglaterra en los actuales Estados Unidos.
Y es que conforme llegaban más europeos al nuevo continente, más crecía la necesidad de almacenar bienes como el pescado seco, los granos, la mantequilla y, por su puesto, las bebidas alcohólicas como el vino, el whiskey y la cerveza.
Entonces, te podrás imaginar lo rentable que era dedicarse al negocio de la tonelería, pues además en esa región existía una abundante cantidad de especies maderables ideales para el trabajo como:
- Roble Blanco.
- Roble Rojo.
- Fresno.
- Castaño.
- Pino.
De la colonia al siglo XX
Con el paso de los siglos las técnicas de la tonelería se han perfeccionado, especialmente y durante los siglos XVIII y XIX.
Eso se debe a que durante esos dos siglos las destilerías aumentaron en número exponencialmente y, el comercio de bienes como el ron creció de la misma forma.
No obstante, la bonanza tonelera entró en declive durante la primera mitad del siglo XX, cuando se produjo un proceso de masificación de los barriles, lo que hasta cierto punto desplazó a los toneleros artesanos.
Debido a esto, la labor de los toneleros se ha tornado cada vez más artesanal, pues esta profesión no se aprende en una escuela y casi siempre se aprende de generación en generación.
Aunque, también la enseñanza de este arte se puede impartir a aprendices que deben ser supervisados durante varios años antes de que sean considerados maestros toneleros.
La tonelería en el siglo XXI
En la actualidad, la tonelería no goza de la misma popularidad que tuvo hace varios siglos, especialmente porque cada vez hay menos interesados en esta tarea.
Sin embargo, los maestros toneleros aspiran a que las nuevas generaciones se interesen por este arduo y noble arte.
Factores importantes en la tonelería
La escogencia de la madera adecuada es fundamental para cualquier trabajo de carpintería. Así, la fabricación de un buen tonel requiere de buenos materiales.
Por eso es necesario saber cuál es el propósito que se le va dar a cada barril.
Entonces, si quieres almacenar vino, puedes usar madera de Roble blanco, pues esta madera aporta notas muy interesantes a la bebida.
Por el contrario, si lo que buscas es almacenar materias secas podrías utilizar madera de Fresno o madera de Castaño.
Maderas ideales para almacenar vinos de alta calidad
Es común que los toneleros utilicen mucha madera de Roble; de hecho, esta es la especie más utilizada en la fabricación de barriles.
Así pues, las variantes del Roble más utilizadas son:
- Roble europeo (Quercus robur).
- Roble blanco americano (Quercus alba).
- Roble rojo americano (Quercus rubra).
Sin embargo, el Roble Europeo es el más utilizado para la fabricación de vinos, ya que posee bajos niveles de taninos y por lo tanto no corrompen el sabor de la bebida.
Al contrario, el Roble europeo le aporta más cuerpo al vino, mientras le ayuda a retener mejor el color y el sabor.
¿Cómo se selecciona la madera indicada?
La escogencia de la madera indicada se hace de acuerdo con variables como el grado de sombra a la que haya estado expuesto el árbol durante su crecimiento, así como el tipo de la fibra y grano de la madera.
Además, se tiene en cuenta el nivel de taninos de la madera, pues estas sustancias pueden alterar o favorecer el sabor y la textura de los vinos.
Entonces, cuando ya se ha escogido la madera ideal para cada uso se procede a la tala del árbol para la posterior producción de las duelas.
Las duelas son pequeños trozos de madera con forma alargada y rectangular que conforman en cuerpo del barril.
Pero, construir un tonel no es algo rápido, pues las duelas deben ser secadas al natural, es decir expuestas a la intemperie por al menos 2 años.
Este proceso de secado a la intemperie de la madera se hace con el objetivo de que el material alcance una maduración natural.
Esto, permite que los sabores amargos producidos por los taninos se liberen al contacto con el vino u otra bebida.
¿Cómo se construye un barril de madera?
Ahora explicaremos brevemente el proceso necesario para obtener barriles artesanales de muy buena calidad.
Y es que, en manos de un maestro tonelero, la construcción de un barril puede tardar poco menos de 12 horas.
Sin embargo, el proceso d fabricación de los toneles suena más fácil de lo que es en realidad. No obstante, intentaremos resumirlo en los siguientes pasos.
Primer paso: recolección de las duelas
Una vez que las duelas están secas, se numeran para saber qué posición llevarán en el armazón del barril.
Segundo paso: levantando el barril
Posteriormente, se juntan las duelas y se sujetan con trozos de metal de forma circular en un proceso conocido como “levantamiento del barril”.
Aquí, el tonelero voltea rápidamente las duelas (previamente sujetadas con el metal) para aplicarles calor y humedad.
Así, el calor y la humedad permiten que las duelas se doblen y tomen la forma arqueada típica del barril.
Tercer paso: a martillo y cincel
Después, con la ayuda de una herramienta manual consistente en un mango de madera atado a una cuerda, se doblan aún más la duelas.
Entonces, esta herramienta permite que con cada giro del mango las cuerdas ejerzan presión sobre las duelas, de modo que las acercan entre sí llenando cualquier espacio entre la madera.
De esta forma se asegura que el barril no presente ningún tipo de filtraciones.
Acto seguido, mediante el uso de un martillo y un cincel, se introducen una o más piezas circulares de metal para que las duelas no se separen.
Cuarto paso: proceso de tostado
Una vez que la armazón del barril está terminada es momento de aplicar fuego al interior del tonel en un proceso denominado “tostado del barril”.
En este proceso se genera fuego al interior del barril de modo que la madera se tueste lenta y controladamente.
Entonces, el tiempo que dure el proceso de tostado va a depender del tipo de material que se vaya a almacenar en el barril.
Así, por ejemplo, si lo que se va a almacenar es vino el tiempo de tostado puede durar alrededor de 30 a 40 minutos.
En contraste, cuando se va a almacenar whiskey la duración del tostado es inferior a un minuto.
Quinto paso: lijar y elaborar las tapas
El paso final en la elaboración del tonel es la construcción de la tapa o cobertura que se construye cuando ya se tiene la medida del diámetro del barril.
Seguido a esto, se lijan los bordes de la tapa para que el cierre encaje herméticamente.
¿Pero, por qué se quema el barril?
El proceso de quemado o tostado al interior del tonel es importante porque proporciona un sabor adicional al vino o cualquier otra bebida.
Entonces, dependiendo del nivel de tueste de la madera la bebida alcohólica tendrá un sabor más o menos caramelizado y o amargo.
Nota: un maestro tonelero realiza todos los pasos anteriores a mano y usualmente no utiliza ninguna máquina industrial ni ningún tipo de pegamento para unir las piezas de madera.
Categorías de la tonelería
Finalmente, vamos a mencionar las categorías en las cuales se divide esta profesión de acuerdo a los usos que se le darán a los toneles.
Tonelería en seco
Aquí se fabrican barriles que serán destinados para almacenar materiales secos como:
- Tabaco.
- Frutas.
- Vegetales.
Estos barriles se caracterizan porque las duelas no están tan unidas, lo que permite una oxigenación mayor de los materiales almacenados.
Tonelería ajustada
Los barriles elaborados para tonelería ajustada son aquellos con el menor espacio posible entre las duelas; están diseñados para que la humedad no pueda entrar en el tonel.
En estos barriles se almacenan materiales como:
- Harina de trigo.
- Harina de maíz.
- Granos.
- Pólvora.
Tonelería húmeda
En este tipo de tonelería se fabrican barriles para almacenar líquidos como:
- Vino.
- Cerveza.
- Whiskey.
- Ron.
En general estos toneles no son muy distintos de los que se fabrican para tonelería ajustada.
Sin embargo, sí han sido expuestos a mayores cantidades de calor y fuego porque se busca añejar bebidas en ellos.